La importancia radica que en ella puedes hacer prevalecer tu opinión personal, hacer valer tus preferencias.
Es una arma de dos filos, ya que uno no siempre tiene la razón, se puede dejar llevar por sentimentalismos más que por la lógica.
Podemos hacernos subjetivos, cuando la desicón la tomamos apresuradamente, o cuando no valoramos la opinión de los demás