En
un principio solo existía el Caos. A continuación, Gea o la Madre
Tierra engendró por si misma a Urano, o el Firmamento Estrellado.
Gea se unió a Urano y tuvo varios hijos.
En primer lugar nacieron seis Titanes varones: Océano, Ceo, Crío,
Hiperión, Japeto y Crono, que era muy perverso, y seis Titánides
mujeres: Tía, Rea, Temis, Mnemósine, Febe y Tetis.
Luego Gea y Urano tuvieron otros hijos, Los Cíclopes. Arges, Estéropes y Brontes.
Y más tarde fueron padres también de los Hecatonquiros, tres monstruos gigantes con cien brazos y cincuenta cabezas cada uno.
Urano era malvado y cada vez que Gea iba a dar a luz, los retenía en el vientre de Gea, no permitiendo que nacieran.
Cansada Gea de sufrir, ya que sentía que estaba por explotar, urdió
un maléfico plan. Dio a luz una hoz de acero brillante y buscó la ayuda
de Crono, el más perverso de sus hijos para que le cortara los órganos
genitales mientras dormía.
Crono esperó agazapado que Urano roncara placidamente y con la hoz
provista por su madre, Gea, lo castró tirando sus órganos al mar.