Sobre un cuerpo en reposo hay dos fuerzas, el peso, con dirección verticalmente hacia abajo, formando una angulo de 90º con la superficie, y la normal, con un valor opuesto al del peso del objeto, y con un sentido opuesto al del peso, es decir, se dirige hacia arriba.
Así, ambas fuerzas se anulan, porque uno es positivo y el otro es el mismo, pero negativo, y el cuerpo permanece en reposo