Es
una película interesante que, a través de los ojos de Sócrates, cuenta como
Atenas, en su apogeo, se involucra en un conflicto con Esparta, lo que los
llevará a la destrucción.
Los
griegos, en el siglo IV y más adelante, levantaron un imperio que abarcaba desde
Asia hasta España, atravesando el mediterráneo.
Dieron
los primeros avances en la ciencia moderna, tratados políticos, de guerra y
filosóficos. De Grecia también surgen creaciones artísticos y arquitectónicos
que dejarían marca para la posteridad, dado que, según criterio generalizado,
son de las obras más impresionantes que se hayan visto.
A medida que las derrotas se acumulan,
los atenienses consternados y despojados de su imperio, se vengan de su mayor
crítico, aunque durante su juventud fue un hombre patriota y de marcadas
convicciones religiosas, pasa luego a rechazar la religión y tomó una postura
que disgustaba, frente al estado; así, condenan a Sócrates por su pensamiento,
ante un jurado popular que lo condena a muerte. La condena de Sócrates se cumple
mediante envenenamiento con cicuta.