Galápagos
es considerado el Santuario de Ballenas porque suelen encontrarse en dicha
zona, las ballenas consiguen una gran cantidad de alimento allí y aprovechan
las aguas poco profundas para alimentarse, esto hace que la zona sea ideal para
su observación; por esta razón, ha llegado a ser llamado “santuario”.
Con espectaculares chapuzones en el
mar, los machos intentan atraer a las hembras y ahuyentar a sus rivales, en un
cortejo de fuerza y belleza. Cuando esos mamíferos marinos parecen querer
despegar del agua, caen de nuevo a la superficie en una explosión de espuma
marina.
Unas 6.000 ballenas jorobadas
(megaptera novaeangliae) abandonan en esta época las gélidas aguas de la
Antártica en busca de la calidez del océano Pacífico ecuatorial, donde
encuentran el lugar propicio para alimentarse, amarse y alumbrar sus crías.
Las ballenas suelen llamar gran
cantidad de turistas al año, que acuden al santuario a observarlas, y, con
cierta frecuencia acuden varias veces en su vida, para disfrutar el espectáculo
ofrecido por las ballenas.